Nos acercamos a la hora de visita en el
primer día de su estancia en Vigo pero por un acto protocolario no
podemos acceder a bordo. Disfrutamos, en este primer día, de sus
vistas desde el muelle, curioseamos su cubierta y nos fijamos en los
“doris” que permanecen estibados a bordo. Así que volvemos al
día siguiente para poder acceder a bordo y conocer un poco más de
cerca el barco si bien no está permitido el acceso a su interior.
Os dejamos a lo largo de la entrada
algunas imágenes del “Creoula” e información sobre la forma de
pesca extraída del fantástico libro “Hombres de Terranova”
escrito por Rosa García-Orellán y Joseba Beobide que os
recomendamos leer si estáis interesados en conocer cómo era la
pesca del bacalao desde 1926 hasta 2004.
La pesca de esta “Frota Branca” se realizaba con los “doris”. El “Creoula” llevaba 50 de estas unidades. Normalmente estos botes eran tripulados por un solo pescador. Los pescadores más novatos pescaban cerca de los veteranos y debían de mantener una distancia de seguridad entre los botes. Los mayores peligros en el banco de Terranova, la niebla y el mal tiempo, permanecían siempre al acecho y era habitual que en tales situaciones se produjese la pérdida de pescadores.
La pesca de esta “Frota Branca” se realizaba con los “doris”. El “Creoula” llevaba 50 de estas unidades. Normalmente estos botes eran tripulados por un solo pescador. Los pescadores más novatos pescaban cerca de los veteranos y debían de mantener una distancia de seguridad entre los botes. Los mayores peligros en el banco de Terranova, la niebla y el mal tiempo, permanecían siempre al acecho y era habitual que en tales situaciones se produjese la pérdida de pescadores.
Cada uno de los “doris” lanzaba
unas 14 liñas unidas unas a las otras y cada una de las liñas tenía
entre 50 y 52 anzuelos. Los pescadores más veteranos podían lanzar
hasta 20 liñas que descendían hasta los 70-80 metros.
Portugal es un país con un alto consumo de bacalao. Por entonces, según cuentan Rosa y Joseba en su libro, se ofrecía a los jóvenes librarse de la mili a cambio de realizar siete mareas en los “doris”. Era, sin duda, una estrategia para mantener el mercado abastecido.
Portugal es un país con un alto consumo de bacalao. Por entonces, según cuentan Rosa y Joseba en su libro, se ofrecía a los jóvenes librarse de la mili a cambio de realizar siete mareas en los “doris”. Era, sin duda, una estrategia para mantener el mercado abastecido.
La “Frota Branca” partía con una
ceremonia oficial de Lisboa en el mes de marzo o abril y regresaba en
octubre. Los “doris”, por su parte, se lanzaban al agua por babor
y estribor a las cuatro de la madrugada y se distribuían de forma
radial en torno al barco nodriza. Cada marinero llevaba su garrafa de
café y pan para cubrir las necesidades de ese día y comían de
manera formal al atardecer, cuando regresaban de nuevo al buque donde,
además, cada marinero tenía que procesar sus capturas.
En la hemeroteca de la revista
Industrias Pesqueras encontramos alguna curiosidad más sobre la
pesca de bacalao con doris de 1927. Nos cuenta la publicación que
"el primer bacalao pescado da lugar a una pequeña ceremonia
tradicional: el capitán lo da a besar al más joven de los mozos
para atraer fortuna a la pesca".
De Industrias Pesqueras son
también las imágenes que mostramos a continuación:
![]() |
Elaboración del pescado a bordo. Foto: Industrias Pesqueras |
![]() |
Ceremonia del beso al primer bacalao. Foto: Industrias Pesqueras |
![]() |
Doris faenando con un buque nodriza de fondo |
Desde luego, el recuerdo de una época
de hombres de hierro en barcos de madera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario