Si hay una palabra que se ha puesto de moda últimamente ha sido “dron”. Los drones, esos pequeños vehículos aéreos teledirigidos, están de moda y lo están para lo bueno y para lo malo. Desde sus acciones de guerra con trágicos finales para la población civil, hasta hacer más fácil el día a día. Y de sus garras no se libra la industria marítima.
Rolls Royce planea llevar los drones al océano y para ello está desarrollando un prototipo de realidad virtual que simulan vistas en 360 grados de las embarcaciones de manera que pueda utilizarse desde tierra por los futuros capitanes. O sea, dirigir los barcos desde tierra sin tripulación, algo de momento totalmente ilegal ya que la legislación establece un número de tripulantes mínimos a bordo. Eso sí, la empresa reconoce que sí sería necesario el factor humano para las maniobras de entrada y salida a puerto.Y a nosotros no nos cabe duda de que para más maniobras también.
Todas las cosas cambian para peor; hay que ver desde que yo hice náutica... Pero se llegará a lo que apunta tu entrada: esperamos no verlo. Más control y beneficios para las grandes corporaciones: ¿Las pequeñas flotas desparecerán?
ResponderEliminarQuería decir que las cosas mejoran para peor, que tiene diferente intención. Salud.
ResponderEliminarHola Emilio. Todo parece ir dirigido hacia ese destino. Es contradictorio que a los profesionales de la Mar nos exijan cada día más papeleo, hasta el punto de necesitar un auxiliar de administrativo a bordo, mientras las grandes compañías plantean lo contrario. Creo que, como siempre, ellas ganarán.
ResponderEliminarUn saludo,